Porque la vida es demasiado fácil como para no inventar nuestras propias normas, nuestro propio sentido de todo lo que a la gente le parece insignificante. Gente que puede que nunca sepa hacer de algo muy muy pequeño, algo enorme, de dimensiones estratosféricas. Soltar una carcajada en el momento mas inoportuno, sin pensarlo demasiado, y contagiar al mundo entero de risa. Reirte en la cara de la ironía, desafiar a la suerte cada vez que doblas una esquina, dormir bajo un manto de estrellas... Miles de estrategias para hacer de la monotonía una leyenda, para hacer de cada día una aventura, y para demostrarle al universo, que no hay cadenas que puedan contigo. Es de esos que ves venir y dices, "¡Coño, que viene!" Y si aparece en el momento, date por seguro que algo grande se avecina. Lo dirá y lo hará una vez, porque a la siguiente estará pensando en qué será lo siguiente que haga. Hecho para hacer ruido, para bailar por la calle, para hacerte esperar durante mas de una hora y aparecer sonriendo piediendo perdón. Deja que te cuente un chiste, que acabarás riendote porque se empezará a descojonar de la risa justo cuando viene lo mejor. Un "Hakuna Matata" en carne y hueso, la fisolosofía de vida mas ignorante, mas placentera, la que de verdad te hace feliz. ¿Cómo será mirarte al espejo y ver reflejada en él a la vida personificada?

No hay comentarios:
Publicar un comentario