jueves, 9 de diciembre de 2010
Hasta que se apaguen las estrellas.
Déjame llevarte allí, el principio del mundo, donde no seamos mas que dos almas fundidas en un paraíso de fantasía. Allá donde no existan las penas y donde tal vez sea necesario plantearse si de verdad mereció en algún momento la pena conformarse con soñar ;un lugar que nos ayude a expulsar todo el amor que inunda nuestros corazones. Solo cierra los ojos y dejate llevar... ¿Qué ves? A simple vista un campo de hielo, cubierto por la nieve, tal vez el sitio mas inospito jamas creado; ahora date la vuelta. Aqui estoy, mi vida, dispuesto a hacer desaparecer el frio y el hielo de tu alma. Con los brazos abiertos, simplemente esperando que entres a ellos para poder comenzar contigo el viaje que marcará nuestras vidas, y nuestro corazón. Quiero ser un incorpóreo, alguien que no tenga sentimientos, un cuerpo inerte que no sea capaz de sentir. No quiero sentir nada, no quiero amar, no quiero soñar. Solo quiero que tú, y sólo tú me llenes con tu amor y que seas todo lo que tengo, todo lo que siempre he deseado, mi gran amor, mi regalo mas preciado.
Vámonos a ese sitio donde cada beso sabrá como el primero, allí donde nazca una flor con cada "te quiero" y donde cada abrazo nos funda y nos convierta en una sola forma, con dos corazones que se desean y que van a estar juntos hasta que se apaguen las estrellas.
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